Rendimos tributo a los árboles que dan refugio a los viñedos, cuidándolos de las plagas y funcionando como un filtro natural para mantener intacta la sanidad de nuestras uvas. El árbol milenario de Magnolia simboliza nuestro compromiso con la sostenibilidad y enfoque orgánico, tanto en el viñedo como en la bodega. Nuestra misión es producir uvas saludables a partir de suelos saludables, esa es la clave para dar vida en la copa a todos los sutiles matices del terruño de primera clase de Mendoza.